El polígrafo es una herramienta de gran fiabilidad, científica y con una veracidad superior al 90%. Actualmente, es la mejor herramienta para la detección de los cambios en parámetros fisiológicos del individuo.
La utilización del polígrafo requiere de un profesional autorizado, certificado y capacitado para manejarlo. Su uso sólo es posible tras haber realizado los estudios y entrenamiento requeridos para su manejo.
El poligrafista examinará previamente el caso, analizará los detalles y elaborará un cuestionario adecuado que será el “alma mater” de la prueba poligráfica.
El polígrafo detecta, fundamentalmente, cambios en nuestro sistema nervioso. Y eso lo hace a través de una serie de parámetros como son las pulsaciones, la tensión arterial, la sudoración, la respiración, etc. Es una herramienta científica empleada con diferentes objetivos. El más conocido es el de la detección de mentiras. Pero también se utiliza para detectar emociones, y para modificar hábitos de conducta mediante su entrenamiento.
Como tal herramienta, es imprescindible la dirección del profesional, no solamente en la utilización del polígrafo, sino también en una entrevista previa, en una preparación del conocimiento del individuo que se vaya a someter al entrenamiento o a las pruebas,
Para poder entender bien el funcionamiento del polígrafo, es necesario adquirir conocimiento en la organización del sistema nervioso y de sus funciones, empezando por las células que lo forman y llegando a estructuras más complejas que constituyen cada uno de sus subsistemas.
Las neuronas son las llamadas “mariposas del alma” por el Dr. D. Santiago Ramón y Cajal. Las denominó así por su belleza y complejidad. Son los componentes fundamentales y las unidades básicas del procesamiento del sistema nervioso. Se comunican entre sí mediante complejos circuitos neuronales y de ellas depende la conducta humana.
La principal misión de la neurona es recibir, procesar y transmitir información, no únicamente entre ellas mismas, sino también con cualquier otra célula del cuerpo mediante la transmisión sináptica.
Lo que diferencia a las neuronas del resto de células del organismo es su capacidad de iniciar y conducir señales, a las que llamamos impulsos nerviosos, con la finalidad de transmitir información.
Y este funcionamiento adquiere especial visibilidad cuando tienen lugar las emociones.
Como emociones podemos entender un conjunto de reacciones complejas y estructuradas, rápidas, difíciles de controlar y que conllevan un fuerte contenido fisiológico y subjetivo que alteran el comportamiento en un momento puntual.
Mediante el polígrafo y sus sensores vamos analizando estas alteraciones y mediante este análisis del poligrafista cualificado se obtiene un resultado a las preguntas que se han realizado. Es la credibilidad de la persona la que se somete al polígrafo.
