Hoy dedicaremos una letras a las falsificaciones de prendas de vestir, accesorios de moda, juguetes, etc. y más adelante abordaremos la falsificación de artículos de valor.
Las falsificaciones atentan contra la propiedad industrial (art. 273 a 277 del CP) y la Ley Orgánica 1/2015, que modifica el Código Penal, modifica el artículo 274, que regula el delito contra la propiedad industrial, e incorpora una Disposición Final Segunda que modifica el artículo 367 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, en el particular aspecto de la destrucción de mercancías que atentan contra la propiedad industrial.
«Fabricación, falsificación, reproducción y distribución, con fines industriales y comerciales, sin el consentimiento del titular de una patente, marca o diseño debidamente registrados, utilizando marcas y signos distintivos idénticos o confundibles con el que se encuentra legalmente patentado o registrado».
Y hay sentencias que absuelven a vendedores ambulantes de un delito contra la propiedad intelectual, dice la jueza que «ningún consumidor puede pensar que está adquiriendo prendas originales en un mercadillo» (Zaragoza).
Un informe del Consejo de Cámaras de Comercio estima que los españoles gastan unos 285 millones de euros al año en adquirir copias de marcas.
El negocio ilegal de venta de falsificaciones en España es el 0,19% del importe mundial, que la OCDE estima en unos 150.000 millones de euros. Madrid y Valencia son las principales ciudades de este comercio en España.
El fenómeno desborda a los efectivos policiales y a los de juzgados. Aquí es donde la intervención de Cuzco Detectives puede ser determinante en la obtención de pruebas para su posterior procedimiento judicial.
En algunos casos es ropa de marca, accesorios como collares, gafas o bolsos, pero en otros casos son juguetes para niños pequeños. Todas las grandes marcas que uno pueda imaginar, Louis Vuitton, Chanel, Hermès, Dior, Gucci, Burberry, Rolex, Disney, Ray Ban, Inditex,… ven todos los días cómo sus objetos y diseños son copiados y falsificados.
El perjuicio patrimonial que este tipo de delincuencia causa a los legítimos titulares de los derechos infringidos es elevadísimo, además de suponer un riesgo para la salud de los niños, dado que algunos de los artículos tienen pequeñas piezas móviles o están fabricados con materiales de baja calidad que pueden dañar a los usuarios.
Todas las firmas han recurrido en los últimos años a prestigiosos despachos de abogados y de detectives privados, que a su vez mantienen mucha fluidez con la policía, que admite estar «desbordada». Vuitton, una de las más copiadas, recurre desde el año 2000 a investigadores privados, según fuentes policiales y judiciales.
Es por ello que Cuzco Detectives, como agencia de investigación privada, ofrece a sus clientes los servicios de investigación y recogida de pruebas de tal manera que les sirva a sus legítimos titulares para las demandas que interpongan y defiendan sus derechos y patentes.