QUÉ SE NECESITA PARA SER DETECTIVE PRIVADO
La profesión de detective cuenta con una cierta imagen romántica debido, en parte, a la literatura de género policiaco y a las películas en las que forma parte de su argumento. Solemos ver historias de ficción en la que los personajes parecen vivir en el límite de lo legal y cuyo itinerario profesional está plagado de misterios que requieren de una implicación que puede suponer un desgaste personal muy acusado.
Lo cierto es que la profesión de detective privado, como cualquier otra, requiere de preparación y formación, además de las propias aptitudes con las que cada individuo pueda contar. En España, el acceso a esta profesión cuenta con un marco legal específico y que hace referencia, entre otros aspectos, a la necesidad de realizar una formación determinada.
La Ley de Seguridad Privada 5/2014, de 4 de abril es la que recoge el ejercicio de la actividad de detective privado, incluyéndola dentro del ámbito de la seguridad privada en el art. 5.1 de la norma. Es el artículo 19 de esta ley el que recoge los requisitos generales y donde se menciona de manera somera la necesidad de contar con una formación adecuada.
La Ley de Seguridad Privada establece los requisitos para acceder a la profesión de detective
No es hasta el artículo 29, donde se indica de manera específica que se deberá acreditar un nivel determinado de estudios, mediante la presentación de una copia compulsada del Título de Bachiller Superior y de un Diploma de Detective Privado.
Se trata de un título universitario de grado en el ámbito de la investigación privada, que acredita la adquisición de las competencias necesarias. Este ciclo formativo tiene una duración de tres años y sus horas lectivas se reparten en formación teórica y práctica. Podemos encontrar Estudios Universitarios para la obtención de Título Universitario en Detective Privado en numerosas Facultades de Derecho de manera específica.
La duración de este grado se puede alargar hasta los cinco años, cuando se realiza en combinación con el Grado de Criminología. Lo mismo pasa cuando lo encontramos junto a estudios de Derecho o Psicología, debido que hay muchas materias coincidentes. Los investigadores privados consiguen así una formación aún más completa para su actividad profesional.
Si las actividades que se desempeñan no se realizaran por un detective privado que cuente con la debida titulación, estaríamos ante un caso de engaño regulado en el Código Penal, Ley Orgánica 10/1995 de 23 de noviembre, en el Artículo 403 que trata sobre el Intrusismo Pofesional:
- 1. El que ejerciere actos propios de una profesión sin poseer el correspondiente título académico expedido o reconocido en España de acuerdo con la legislación vigente, incurrirá en la pena de multa de doce a veinticuatro meses. Si la actividad profesional desarrollada exigiere un título oficial que acredite la capacitación necesaria y habilite legalmente para su ejercicio, y no se estuviere en posesión de dicho título, se impondrá la pena de multa de seis a doce meses.
- Se impondrá una pena de prisión de seis meses a dos años si concurriese alguna de las siguientes circunstancias:
- a) Si el culpable, además, se atribuyese públicamente la cualidad de profesional amparada por el título referido.
- b) Si el culpable ejerciere los actos a los que se refiere el apartado anterior en un local o establecimiento abierto al público en el que se anunciare la prestación de servicios propios de aquella profesión.
Otros dos requisitos que también son necesarios son los de la mayoría de edad y tener la nacionalidad de alguno de los Estados miembros de la Unión Europea o de un Estado parte en el Acuerdo sobre el Espacio Económico Europeo, o ser nacional de un tercer Estado que tenga suscrito con España un convenio internacional en el que cada parte reconozca el acceso al ejercicio de estas actividades a los nacionales de la otra.
Para ejercer la profesión de detective privado se requieren unas habilidades específicas
Además de todos estos requisitos, un detective privado requiere de ciertas aptitudes personales que servirán para el desarrollo de su profesión. Entre otras, requerirá de un amplio conocimiento de los medios digitales donde se encuentra la mayor parte de la información en la actualidad. También es de gran utilidad contar con conocimientos en tecnología y sus posibles aplicaciones.
Las habilidades de comunicación constituyen un gran recurso para obtener información en multitud de ocasiones para los objetivos en sus informes de investigación. La Criminología será otra gran herramienta que le ayudará a relacionarse con las víctimas de los delitos y a configurar un perfil criminal determinado.
La capacidad analítica resultará esencial sobre todo cuando las investigaciones impliquen ámbitos más técnicos, como por ejemplo los detectives privados especializados en el ámbito mercantil. En definitiva, podemos determinar que el detective privado estará formándose de manera continua.
Un buen detective contará, también, con habilidades para la adaptación a las distintas situaciones que puedan surgir durante la investigación. En muchas ocasiones surgirán eventos inesperados que necesitarán de una rápida respuesta si se pretende lograr el éxito. Con esta pericia también se podrá pasar inadvertido cuando sea necesario.
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